miércoles, 14 de diciembre de 2011

NAVIDAD: New York y Londres con villancicos en inglés. Año nuevo en China, Nueva York y Londres









La gente de la villa, los villanos, fueron los que adaptaron los antiguos himnos y cantos en latín con los que la Iglesia recordaba la llegada de Jesús, transformándolos en canciones muy dulces e ingenuas. Son esas las canciones que -en honor de sus autores- hoy se conocen con el nombre de villancicos.
Los primeros se originaron, según se cree, en Inglaterra, en la época de Enrique I, los cantos eran en latín y amenizaban las fiestas de la Corte. "El Canto del Jabalí", era llamado canto del villano, y una especie de diminutivo se transformó en villancico para designar estos coros o estribillos.
El día de Navidad fue oficialmente reconocido en el año 345, cuando por influencia de San Juan Crisóstomo y San Gregorio Nacianzeno se proclamó el 25 de diciembre como fecha de la Natividad de Cristo.
Pero algunas de las costumbres tradicionales de la Navidad llegaron más tarde, como la de cantar villancicos que no se agregó hasta la Edad Media.
Por Navidad, los cristianos africanos se reúnen y leen pasajes de la Biblia. Posteriormente realizan bailes y cantos al aire libre. En Etiopía realizan una ceremonia bañándose en los ríos.
Según las crónicas, el pavo de Nochebuena tuvo su origen en México en el S. XVI. Los aztecas se lo hicieron probar a Hernán Cortés, a quien le agradó y lo llevó a España.

Jingle Bells

I love those J-I-N-G-L-E bells
Oh those holiday J-I-N-G-L-E bells
Oh those happy
J-I-N-G-L-E B-E-DOUBLE L-S
I love those
J-I-N-G-L-E bells ... oh

Jingle bells, jingle bells
Jingle all the way
Oh what fun it is to ride
In a one horse open sleigh
Jingle bells, jingle bells
Jingle all the way
Oh what fun it is to ride
In a one horse open sleigh

Dashing through the snow... ooh oh
In a one horse open sleigh... today
O'er the fields we go... ooh oh
Laughing all the way... today

Bells on bob tails ring
Making our spirits bright
What fun it is to ride and sing
A sleighin' song tonight

Ho-ho-ho, ho-ho-ho
Ho-ho-ho, ho-ho-ho
Ho-ho-ho, ho-ho-ho

Jingle bells, Jing... Jingle bells
Jingle all the way
Oh what fun it is to ride
In a one horse open sleigh
I love those J-I-N-G-L-E bells
Oh those holiday J-I-N-G-L-E bells
Oh those happy
J-I-N-G-L-E B-E-DOUBLE L-S
I love those Jingle Bells ...
All the way ... Jingle all the way




Silver Bells

City sidewalks
busy sidewalks
Dressed in holiday style
In the air there's a feeling
Of Christmas
Children laughing
People passing
Meeting smile after smile
And on every street corner
You hear...

Silver bells
Silver bells
It's Christmas time
In the city
Ring-a-ling
Hear them ring
Soon it will be
Christmas Day.




Merry Christmas

So this is Christmas
And what have you done
Another year over
A new one just began
And so this is Christmas
I hope you have fun
The near and the dear one
The old one and the young

A Very Merry Christmas
And a Happy New Year
Let's hope it's a good one
Without any fear

And so this is Christmas
For weak and for strong
For rich and the poor ones
The world is so wrong

And so happy Christmas
For black and for white
For yellow and red ones
Let's stop all the fight

A Very Merry Christmas
And a Happy New Year
Let's hope it's a good one
Without any fear








viernes, 9 de diciembre de 2011

PELÍCULAS SOCIALES: Tiempos modernos de Charles Chaplin


Como director, productor, guionista, músico y actor: Charles chaplin


La película constituye un retrato de las condiciones desesperadas de empleo que la clase obrera tuvo que soportar en la época de la Gran depresión, condiciones promovidas, en la visión dada por la película, por la eficiencia de la industrialización y la producción en cadena.


En la película también intervienen Paulette Goddard, Henry Bergman, Stanley Sandford y Chester Conklin. La película muestra escenas de corte futurista de la factoría en la que trabaja Charlot que podrían haber sido influenciadas por el film Metrópolis de Fritz Lang.
Tiempos modernos fue un filme a caballo entre el cine mudo y sonoro. Se incluyeron algunos efectos sonoros en la película, como música, cantantes y voces provenientes de radios y altavoces así como la sonorización de la actividad de las máquinas.
Al final del film puede escucharse brevemente la voz de Charles Chaplin, que canta una versión de la canción de Léo Daniderff, Je cherche après Titine, pero con una letra sin sentido, conocida como "Charabia", cuyos sonidos tratan de asemejarse a una mezcla de francés e italiano, con alguna palabra reconocible en inglés.
La depresión de los años treinta.
Esta es la parte más difícil del trabajo, ya que creo que también hay aspectos de esta película que tienen que ver con el tema anterior (La primera guerra mundial y sus consecuencias).
La depresión de los años treinta
La posguerra inició un periodo de expansión económica generalizada que disminuyó la producción, lo cual dio pie a que hubiera muchas huelgas y protestas y un malestar generalizado.
La industrialización en una sociedad moderna y capitalista es precisamente lo que crítica sarcásticamente Chaplin en esta película.
Tiempos modernos es una denuncia violenta y divertida a la consolidación e industrialización de una de las más grandes potencias del mundo: E.E.U.U.
Los individuos comenzaron a ser esclavos alienantes del ritmo de las maquinas, que eran las que dictaban las leyes y los horarios de su vida.
El movimiento obrero se mantenía con poca fuerza y los sindicatos luchaban esencialmente por la obtención de ventajas materiales. Debido a tanta presión y al alto grado de industrialización, la mayoría de ellos acabaron por perder su personalidad y convirtiéndose, metafóricamente, en máquinas.
Ficha técnica.
Esta película fue escrita, producida y dirigida por Charles Chaplin, con Carter de Haven y Henry Berman como ayudantes de dirección. Fotografía de R, H, Totheroh e Ira Morgan.
Música compuesta por Charles Chaplin.
Dirección musical de Alfred Newman.
Una película de la United Artists, estrenada el 5 de Febrero de 1936. Duración: 85 minutos.
Reparto:
Charles Chaplin Heinie Conklin
Paulette Goddard Lloyd Ingraham
Henry Bergman Edward Kimball
Chester Conklin Wilfred Lucas
Stanley Sanford Mira Mckinney
Hank Mann John Rand
Louis Natheaux Walter James
Allan Garcia Dr.cecil Reynolds
Richard Alexander



Sinopsis.
La historia trata de un obrero de una industria del acero, que acaba perdiendo la razón, extenuado por el frenético ritmo de trabajo.
Charlie trabaja en una fabrica donde enrosca tornillos en una cadena de montaje. Su compañero (Chester Conklin) y él, quedan atrapados en el maquinismo, pero consiguen salvarse y bajar de nuevo al suelo.


Por si esto fuera poco, es elegido por el director, para probar una nueva maquina que consiste en servir la comida al obrero en un espacio muy corto de tiempo. Pero los complejos mecanismos de la maquina se estropean: todos excepto el brazo limpia-bocas, que nunca para de funcionar.
Charlie es liberado del mecanismo y retorna a su trabajo, pero es tan alienante que se vuelve loco y ataca a una mujer, con una llave inglesa. A raíz de esto se lo llevan a un hospital psiquiátrico.


Después de pasar un tiempo en el hospital, logra salir y consigue otro trabajo. Todo va bien hasta que no se sabe muy bien porque se declara una huelga.


En la calle es confundido por el cabecilla de dicha huelga al coger una bandera roja que se había caído de un camión. Se lo llevan a la cárcel donde queda muy sorprendido al ver a su compañero de celda, muy corpulento, haciendo calceta.
Es recompensado, por descubrir un contrabando de cocaína y trasladado a una celda individual donde lo tratan como un rey, y esto hace, que una vez indultado, eche de menos la cárcel.
Mientras tanto una joven huérfana (Paulette Goddard), es detenida cuando intentaba robar comida. Al verlo Charlie se inculpa, esperando volver a prisión, pero la jugada le sale mal, por lo que decide ir a un restaurante y pedir una suculenta comida, que después no puede pagar. Así es detenido y conducido en el mismo furgón donde llevan a la huérfana. Logran escapar los dos.
Charlie consigue un trabajo nocturno en unos grandes almacenes, donde la huérfana duerme, come y juega, mientras el vigila; pero de pronto entran unos ladrones, que son sus antiguos compañeros de la fabrica sin trabajo y sin dinero, por lo que montan una gran fiesta en los almacenes y Charlie se queda dormido sin poder escapar. Así se lo llevan de nuevo a prisión.

La muchacha por el contrario si que logra escapar y encuentra trabajo en un cabaret, donde se pone a trabajar él, cuando es puesto en libertad.
Nada de lo que hace esta bien, excepto como camarero cantante. Pero como siempre llega la policía a detener a la muchacha, y se van obligados a escapar. Una vez seguros en la calle, hablan sobre la posibilidad de una vida mejor.
Una de las cosas que más me ha llamado la atención de esta película es la regularidad con que Chaplin ingresa en la cárcel; aunque también merece la pena comentar la canción que interpreta Charlie en una lengua imaginaria.

En esta película vemos a Charlie interpretando el pequeño vagabundo por ultima vez. Sin embargo, habrá momentos en el gran dictador que nos hará recordar al Charlie de siempre y después la imagen se desvanecerá definitivamente.
Chaplin fue analizado en detalle en los años treinta por Jan Mukařovský, en el “lenguaje” de las comedias de  que llamó la atención sobre su extraordinario efecto estético motivado por su vestido lleno de contrastes (la parte superior elegante, la inferior miserable y ridícula) y, sobre todo, por su comportamiento lleno de contradicciones (vestido de harapos, muchas veces se comporta como un caballero, de esmoquin, en la mayoría de los casos como un holgazán). El vestido y el comportamiento en las películas de Chaplin forman sin duda una parte integrante de su lenguaje específico, teniendo un carácter semiótico muy expresivo.
Recordemos películas donde el vagabundo aparece patinando en la pista, comiendo sandía, comiéndose el zapato, bailando con las ninfas del bosque, salvando a Edna y alejándose solitariamente por al camino.



En 1966, Richard Meryman entrevistó a Charlie Chaplin y hablaron horas sobre la inspiración que iluminó sus películas.
El nacimiento del Vagabundo, el arte de la improvisación, el momento en que aparecen los gags, ese misterio llamado “genio”, la traumática llegada del cine sonoro…
En 1966, Richard Meryman entrevistó a Charlie Chaplin y hablaron horas sobre la inspiración que iluminó sus películas. Pero la entrevista completa nunca apareció, hasta ahora en 2004. La entrevista girará en torno a su trabajo y su arte, y a nada más, tal como sigue:
Me gustaría saber cómo trabaja.
Mi carácter consiste en que me preocupo por mi trabajo. Me preocupo por todo lo que hago. Si pudiera hacer algo mejor, otra cosa que no fuera cine, lo haría, pero no puedo.
¿Puede hablar del momento en que creó al Vagabundo?

Surgió en medio de una emergencia. El cameraman (el hombre calificado para la toma de imágenes) me pidió que me pusiera un maquillaje divertido. Yo no tenía la menor idea de qué hacer.
Así que fui a la sala de vestuario y, en el camino, pensé, bueno, los haré filmar algo contradictorio:
Pantalones amplios.
Saco ajustado.
Cabeza grande.
Sombrero pequeño.
Alguien harapiento y al mismo tiempo un caballero.
No sabía qué hacer con la cara, pero sabía que iba a ser una cara triste y seria.
Quería esconder su lado cómico, y entonces encontré esos bigotes. Unos bigotes que no tenían nada que ver con una caracterización tradicional; eran más bien tontos y no escondían mi expresión.

Cuando se vio, ¿cuál fue su primera reacción?
Pensé: “Está bien”. Pero no encendió nada especial en mí. No hasta que tuve que interpretarlo delante de la cámara. Al entrar en cuadro, me sentí vestido, sentí que tenía una actitud.
La escena, de la película Strange Predicament, tenía lugar en el lobby de un hotel, y el vagabundo pretendía hacerse pasar por un huésped para llegar hasta uno de los sillones y descansar un rato.

Todos lo miraban con cierta suspicacia, mientras yo imitaba todo lo que los huéspedes hacían: miraba hacia el mostrador, sacaba un cigarrillo, lo encendía, veía pasar un desfile. Y entonces me tropecé con la escupidera. Ese fue mi primer gag. En ese momento nació el personaje. “Este es un muy buen personaje”, me acuerdo que pensé después de tropezarme. Lo único que quería mantener no era tanto el traje sino sus pies.
No importaba cuán bullicioso o exuberante se sintiera, siempre cargaba con esos pies cansados y enormes. Le pedí al departamento de vestuario dos pares grandes de zapatos viejos. Como tengo pies absurdamente pequeños, suponía que unos zapatos así me darían un andar cómico.
 Tengo gracia natural, pero tratar de ser agraciado con zapatos enormes… eso sí es gracioso.
¿Cree que el Vagabundo funcionaría en estos tiempos?

No creo que haya lugar para una persona así hoy en día. El mundo se ha transformado en un lugar un poco más ordenado. Aunque no más feliz. No existe la misma humildad. Diría que la humildad se ha convertido en una antigüedad. Pertenece a otra era. Por eso no podría crear al Vagabundo hoy. Y está el tema del sonido, por supuesto. Cuando llegó el cine sonoro no pude seguir con el personaje. No sabía qué voz darle. Por eso tuvo que desaparecer.

¿Cuál cree que es el encanto del Vagabundo?

Tiene esa pobreza gentil y silenciosaEso es lo que disfruto del personaje: que sea a la vez fastidioso y delicado. Pero nunca pensé en él en términos de encanto. Siempre relacioné al Vagabundo con cierto espíritu cómico que debía expresar.
La reacción del público me motivó, pero nunca relacioné la creación del personaje a ella. El público siempre aparece al final del trabajo, no durante.






¿Cómo se le ocurre un gag? ¿Aparece de la nada o forma parte de un proceso?

No, no hay ningún proceso. Las mejores ideas surgen en medio de una situación. Si se consigue una buena situación cómica, el impulso continúa y continúa.
Como la secuencia de patinaje en The Rink. Encontré un par de patines y empecé. Todos esperaban que me cayera, pero yo seguía y seguía patinando graciosamente en un pie. Nadie esperaba eso del Vagabundo.

En la escena del poste de luz en Easy Street.
Apareció en una escena en la que yo era un policía intentando controlar a un matón. Le pego con una cachiporra, le vuelvo a pegar, y le pego una vez más. De repente, todo parece un mal sueño: él sigue arremangándose, impasible a los golpes. Después me alza y me vuelve a bajar. Entonces pensé: bueno, con su fuerza, podría arrancar el poste y mientras lo hace, yo puedo saltarle sobre la espalda, empujar su cabeza dentro de la luz y asfixiarlo con el gas del farol.





Las cosas más graciosas aparecieron de esa improvisación. Pero hay momentos de agonía, también. Días miserables en los que nada funciona. Siempre dependió de mí encontrar algo que hiciera reír. Y no se puede ser gracioso sin una situación.
Se puede ser payasesco o torpe, pero se necesita siempre una situación cómica.
¿Observa a las personas y toma situaciones de ellas, o nacen de su imaginación?

Cada uno crea un mundo propio. El mío era mi estudio en California. Los momentos más felices me ocurrieron ahí, cuando tenía una idea o algo me sugería una historia. Entonces las cosas empezaban a fluir. La noche es un lugar bastante solitario en California, especialmente en Hollywood, así que era maravilloso crear un mundo cómico, un mundo diferente al cotidiano. Y es divertido. Uno se sienta, piensa, ensaya durante medio día, lo filma y está listo.
¿El realismo es una parte integral de la comedia?

Sí, absolutamente. La situación absurda debe ser tratada con absoluto realismo. La audiencia lo sabe, y es tan real y tan absurdo a la vez que los deja exultantes.
Bueno, también está la crueldad. Había mucha crueldad en sus comedias.

Bueno, la crueldad es el elemento básico de la comedia: lo que parece sano resulta enfermo, y si uno lo remarca con suficiente mordacidad, el público lo ama. Reconocen en eso la farsa de la vida, y se ríen de ello para no llorar o morir.
Es una cuestión relacionada a ese misterio llamado candor. Si un hombre mayor resbala con una cáscara de banana y se cae lentamente, no nos reímos. Pero si le sucede a un caballero pomposo, orgulloso y exagerado, entonces nos reímos.
Toda situación embarazosa es graciosa, sobre todo si es tratada con humor.
De los payasos se puede esperar cualquier disparate. Pero si un hombre que se cree astuto entra a un restaurante, y resulta tener un agujero en el pantalón, bueno, si se trata con humor, eso puede ser muy gracioso. Sobre todo si se hace con dignidad y orgullo.

Su comedia es, en parte, una comedia de incidentes. No es intelectual, sino que está hecha de cosas que suceden.

Siempre creí que una serie de incidentes relacionados arman una historia, como las bolas ordenadas antes de un partido de pool. Cada bola es un incidente. Una toca a la otra, y entre todas arman un triángulo. Es una idea que me ha acompañado mucho en mi trabajo.

En sus películas a usted le gusta mantener un ritmo acelerado y apilar un incidente encima de otro. ¿Lo considera una característica de su trabajo?
No sé si lo llamaría una característica. He observado a otros comediantes capaces de bajar el ritmo, pero yo funciono mejor así. No tengo tanta confianza en lo que hago como para moverme despacio. Pero la acción no lo es todo.
También debe haber desarrollo, porque de otra manera pierde realismo: se tiene un problema y se lo intensifica; no se empieza por el problema intensificado.
Uno se pregunta: bueno, ¿hacia dónde vamos desde acá? ¿Cuál es el desenlace natural de esto? Si evoluciona de un modo realista y convincente, el problema se vuelve cada vez más y más complicado. Pero debe mantener su lógica, si no se obtendrá una comedia, pero no una comedia excitante.

¿Le preocupa el sentimentalismo o el cliché?

No, no en la pantomima. No me preocupa el sentimentalismo, simplemente lo evito. Y no le temo al cliché: la vida es un cliché (
idea o expresión demasiado repetida o formularia). Nadie nace con más originalidad que otros.


Todos vivimos y morimos con tres comidas diarias, y todos nos enamoramos y nos desenamoramos. Nada puede ser un cliché mayor que una historia de amor, pero la historia puede continuar todo lo que uno quiera, siempre y cuando se le dé un tratamiento interesante.




¿Cuántas veces repitió el gag de comerse el zapato en La fiebre del oro?

Lo filmamos una y otra vez como durante dos días. El pobre actor Mack Swain se enfermó. Los zapatos eran de regaliz, y comió demasiado. Ya el último día repetía: “No puedo comer más de esos zapatos”.
La idea del gag me la dio la fiesta Donner (En 1846, un vagón de tren con 81 pioneros que iba hacia California quedó atrapado en una nieve de Sierra Nevada). Recurrieron al canibalismo y hasta se comieron un mocasín. Cuando me enteré, pensé: ¿estofado de zapato? Hay algo gracioso en eso. Sufrí un tiempo tratando de sacar adelante la historia, hasta que llegamos a una situación sencilla: el hambre.
En el momento en que se soluciona la lógica de una situación, su realismo y su posibilidad de suceder, las ideas empiezan a fluir. Es una de las mejores escenas de la película.
¿Tuvo dudas o preocupaciones cuando empezó a hacer cine sonoro?

Sí, claro. En primer lugar, tenía experiencia pero no entrenamiento académico, y hay una gran diferencia. Pero también sentía que tenía talento, que era un actor nato.
Sabía que era mucho más fácil para mí hacer pantomima que hablar. Soy un artista, y sabía muy bien que en el hecho de hablar gran parte de eso desaparecería.
Sabía que no iba a ser mucho mejor que cualquier otro actor que tuviera buena voz y buena dicción.
¿Era una cuestión de incorporar una nueva dimensión de la realidad lo que podía herir la fantasía del cine mudo?

Sí. Siempre he dicho que la pantomima es mucho más poética, y tiene un atractivo universal que todos pueden entender si está bien hecha.
El diálogo reduce a todos a cierta volubilidad. La voz es algo hermoso, sumamente revelador, y yo no quería ser demasiado revelador porque podía mostrar una limitación.
Son pocas las personas cuyas voces alcanzan o al menos ofrecen la ilusión de gran profundidad, mientras que el movimiento es tan cercano a la naturaleza como el vuelo de un pájaro.
La expresión de los ojos… no hay palabras. Hay expresiones de la cara que nadie puede ocultar. Un gesto de decepción puede ser tan sutil… Tuve que considerar todo esto antes de empezar a hablar. Y sabía muy bien que con el cine sonoro yo había perdido buena parte de mi elocuencia.

¿Tiene una película favorita?

Creo que me gustó mucho Luces de la ciudad. Es sólida, está bien hecha. Es una verdadera comedia. Es una película poderosa. Lo que me impresionó es cuán cerca se encuentran la tragedia y la comedia.
Realmente eso nunca me interesó. Más bien es una idea que forma parte de mí. No creo que se pueda hacer humor sin sentir una gran piedad y simpatía por los hombres.
¿Será que queremos librarnos de las tragedias?

No, creo que la vida es mucho más que eso. Si ése fuera el motivo, habría muchos más suicidios. Muchos más querrían salirse de la vida. Creo que la vida es algo maravilloso y debe ser vivida cualesquiera sean las circunstancias, incluso en la miseria. Prefiero la vida. Prefiero la experiencia por la experiencia misma.
Creo que el humor nos salva. Demasiada tragedia nos puede hacer naufragar. Por supuesto que la tragedia es parte de la vida, pero también nos son dadas las herramientas para neutralizarla, para defendernos de ella. El humor es algo universal, y creo que se deriva, más o menos, de la piedad.

¿Cree que existe eso llamado “genio”?

Nunca supe qué es un genio. Supongo que es alguien con talento, altamente emocional y capaz de dominar una técnica. Pero todos estamos dotados de una u otra manera.
Aunque muchos excelentes profesionales han sido confundidos con genios.

Entrevista publicada en Radar en su edición del 22/8/2004
Filmografia.






Cortos.

Películas como actor:
1914: Charlot periodista/ganarse la vida; Carreras sofocantes: Aventuras extraordinarias de Mabel; Todo por un paraguas; Charlot y el juego; Charlot en el baile; Charlot extremadamente elegante; Un amor cruel; Charlot huésped ideal; Mabel y el auto infernal (largometraje).

Como actor y guionista:
Charlot de conquista; Charlot camarero(largometraje)(y codirección), Charlot y la sonámbula; Charlot sufragista; El mazo de Charlot (y codirección); Charlot ladrón elegante (y codirección); Charlot arbitro; Mabel vendedora ambulante (y codirección); Charlot en la vida conyugal (y codirección).

Como director, guionista y actor:
Charlot falso dentista; Charlot Regioseeur; Charlot pintor; La pícara primavera; Charlot artista de cine; Nueva colocación de Charlot/Nueva profesión de Charlot; Charlot y Fatty en el café; Charlot conserje; José rival de Charlot; Charlot panadero; Mabel t Charlot en las carreras; Charlot domina el piano, Charlot se engaña.
Largometrajes:

Como director, guionista y actor:
Aventura de Tillie/El romance de Charlot (solo actor); Charlot tiene una mujer celosa (corto); Charlot prehistórico.
1915: Charlot cambia de oficio; Charlot trasnochador; Charlot campeón de boxeo/Un campeón de boxeo; Charlot en el parque (corto); la fuga de Charlot; Charlot en la playa: Life (inacabada); His regenaration (corto) (solo como actor invitado); Charlot trabajando como papelista/Charlot empapelador; Charlot perfecta dama (corto); Charlot portero de banco; Charlot marinero (corto); Charlot en el teatro (corto).
1916: Carmen: Charlot licenciado de presidio.

Como director, productor, guionista y actor:
Charlot encargado de bazar (corto); Charlot bombero; Charlot músico ambulante; Charlot a la una de la madrugada; El conde; La revista Charlot (de montaje*); Charlot prestamista; Charlot tramoyista de cine (corto); Charlot héroe del patín.
1917: Charlot en la calle de la paz (corto); Charlot en el balneario; El inmigrante/Charlot emigrante; El aventurero.
1918: Vida de perro: Chase me Charlie (de montaje*); aventuras de Charlot (solo actor, codirector y coguionista); Armas al hombro; The bond (corto); (sólo director, guionista y actor); Half-reeler for British War Loan Apeeal (corto).
1919: Al sol; Un día de Juerga.
1921: El chico; el excéntrico (sólo actor invitado); Vacaciones (corto).
1922: Día de paga (corto).
1923: El peregrino; Una mujer de París; (también música para su reestreno en 1976); Almas en venta (sólo actor invitado); Hollywood (sólo actor invitado).
1925: La quimera del oro (también música para su reestreno en 1942).
1926: A woman of the Sea/The Sea Gull (sólo dirección adicional, producción y coguionista) (inacabada).
1928: El circo (también música para su reestreno en 1970); Espejismos (sólo actor invitado).

Como director, productor, guionista, músico y actor:
1931: Luces de la ciudad.
1936: Tiempos modernos.
1940: El gran dictador.
1947: Monsieur Verdoux (y narración).
1948: La grande parade de Charlot (de montaje) (Francia*).
1952: Candilejas (y coros)
1957: Un rey en Nueva York (GB).
1959: The Chaplin Revue (de montaje) (y narración).
1960: El mundo de la risa con los grandes payasos (de montaje*).
1961: Risas y sensaciones de antaño (de montaje*).
1963: Thirty Years of Fun (de montaje*).
1964: Big Parade of comedy (de montaje*).
1967: La condesa de Hong kong (GB).
Charles aparece también en:
1915: Introducing Charlie Chaplin (corto).
1938: Charlie Chaplin Carnival; Charlie Chaplin Cavalcade; Charlie Chaplin Festival.
1966-74: The Chaplin Documentary (desconocido).
1967: The funniest Man in the world, Upptackten, episodio de stimulantia (Suecia).

* En su elaboración no intervino Chaplin.

Referencias


sábado, 5 de noviembre de 2011

EL CINE MUSICAL: Dos grandes directores: Carol Reed y Roman Polanski, llevan al cine musical la novela de Dickens, Oliver Twist.

Ha sido adaptada en numerosas ocasiones para el cine, la televisión y teatro musical. Se ha traducido a numerosas lenguas. 


Carol Reed

Con Carol Reed realizó un exuberante musical (1968) sobre el clásico de Charles Dickens, que ganó seis Óscares de la Academia, entre ellos el de mejor director. 


CharlesDickens

Precisamente uno de los progagonistas era Oliver Reed, su sobrino. Oliver Twist (1837 – 1838) es un relato auténticamente autobiográfico de Dickens y que se publicó por entregas durante dos meses.

Es un autor cuyos personajes son de los más memorables y creativos en la literatura inglesa, por sus peculiaridades insólitas, y con certeza por sus nombres, aunque los intereses del lector no siempre coincidían con lo del autor, como revelan las misivas, ya que este tipo de novelas era por entregas.


Un gran ejemplo de esto aparece en la novela mensual Oliver Twist. En un episodio de la misma, Dickens metió a Oliver en un enredo de un robo. Esta entrega concluía cuando Oliver recibía un disparo.

Los lectores estimaron que se verían forzados a esperar sólo un mes para saber cómo había salido el protagonista de ese disparo, pero Dickens no reveló lo que sucedió con el joven Olver en el siguiente número sino que los ansiosos lectores tuvieron que esperar dos meses para descubrir si el niño viviría.Esto muestra como el deseo de un lector involucrado —de saber que había sucedido— no coincide con la intención del autor, que era la de extender la intriga.

Otro efecto importante del estilo episódico fue la exposición a las opiniones de sus lectores. Como Dickens no escribía sus capítulos mucho antes de su publicación, podía comprobar la reacción pública y cambiar la historia dependiendo de esas mismas reacciones.

Jack Wild es Artful Dodger en Oliver 
arturo_gutierrez_torres@hotmail.com

En Oliver Twist, Dickens proporciona a los lectores un idealizado retrato de un joven irrealmente bueno, cuyos valores jamás son subvertidos por brutales orfanatos o forzadas intervenciones en una banda de pequeños carteristas.

También sus posteriores novelas se centran en personajes idealizados.

Oliver Twist es una de las primeras novelas sociales de la historia de la literatura.

Llama la atención a sus lectores sobre varios males sociales de la época, como el trabajo infantil o la utilización de niños para cometer delitos.

Dickens se burla de la hipocresía de su época tratando estos temas tan serios con sarcasmo y humor negro.

La novela pudo haber sido inspirada por la historia de Robert Blincoe, un huérfano cuyo relato sobre la dureza de su vida como trabajador infantil en un molino de algodón tuvo una gran difusión en la década de 1830.

Argumento
Oliver es un pequeño que no quiere vivir con la Reina Madam Mann, el señor Sowerberry.
 Es un niño huérfano que sólo tiene un pañuelo de seda de su madre.
Observamos cómo Dickens diferencia clara y abiertamente los espacios del campo y la ciudad;
y cómo los puebla de una serie de personajes acorde con el simbolismo de uno y otro ambiente.
De este modo, mientras que el campo representa la alegría, la felicidad, el bienestar; la ciudad, Londres, simboliza todo lo contrario: la delincuencia, la suciedad, la pobreza, la prostitución, el crimen o la marginalidad entre otros temas.
Oliver escapa del campo, y más en concreto de su último trabajo como ayudante de funeraria, para marchar hacia la ciudad de la cual ha escuchado maravillas.
Pero lo que hace Dickens es arrojar al muchacho al mundo del hampa. Dickens critica abiertamente la composición de la ciudad y de todos sus elementos pero introduce a su personaje principal en este mundo.
Oliver Twist, así como el resto de los chicos del orfanato, se están muriendo de hambre y deciden jugarse quién de ellos pedirá más comida.
Oliver es el elegido. En la cena de esa noche, después de su ración normal, Oliver se dirige al director del orfanato y le pide más comida.
Tachado de ser problemático por Sr Bumble, el bedel y por el director, Oliver es ofrecido como aprendiz a cualquiera que lo quiera contratar.
 Tras ser condenado a limpiar chimeneas, Oliver se convierte en aprendiz del enterrador Sowerberry.
Pero Oliver se pelea con uno de los chicos del enterrador, y decide escapar e irse a Londres.
En las afueras de la ciudad, cansado y hambriento, Oliver conoce a Jack Dawkins, quien le ofrece un lugar donde hospedarse en Londres.
Lleno de inocencia, Oliver se ve inmerso en el mundo del hampa de Londres e ignorando sus tareas reales, se encuentra en medio de una banda de chicos carteristas dirigida por el malvado Fagin.
Con respecto a los personajes que pueblan uno y otro ambiente cabe resaltar que en el campo, lugar idílico, habitan por así decirlo, la clase pudiente o acomodada de la Inglaterra victoriana.
De esta manera, encontramos a personajes como son los Maylies, el señor Giles, o el doctor.
Mientras que Dickens deja la ciudad en manos de personajes como Fagin y su banda de delincuentes.
Londres es descrito como una sucesión de laberínticas calles y callejones, patios por lo que Oliver es arrastrado, y en los que percibe la pobreza, la suciedad o la delincuencia.
En algunos pasajes Londres se parece a una ciudad gótica que nos recuerda a los relatos de Poe.
Y dentro de esa ciudad encontramos el personaje femenino de Nancy, quien como una parte de las mujeres de la época victoriana se gana la vida en la calle.
Ayuda a Fagin para recuperar a Oliver, aunque la precaria situación de los orfanatos o de las parroquias inglesas de la época.
Asimismo la delincuencia y la marginalidad de Londres propiciada en gran media por la inmigración del campo a la ciudad.
También destacar el papel del sistema judicial, quien no duda en castigar severamente a un pobre chico.
Pero pese a todo al final se impone la cordura. "Oliver Twist" es la historia de una lucha por progresar en la vida.
Las andanzas de un pobre huérfano en la Inglaterra victoriana. Sus ansias por encontrar un sitio en la sociedad.
Un sitio que por derecho le corresponde, pero que le ha sido arrebatado desde su nacimiento.

AMBIENTE SOCIAL
Londres era una capital terriblemente pujante y era un destino muy popular en los flujos migratorios.

Las prostitutas (marinas) poblaban los bares y las calles de Whitechapel, uno de los barrios más pobres del East End.

Pero también se encontraban cerca de teatros y establecimientos de ocio masculino, desde burdeles hasta locales donde los hombres bebían y disfrutaban de espectáculos eróticos que muchas veces estaban protagonizados por menores de edad.

La prostitución homosexual también existía, aunque lógicamente el secretismo en torno a ella era mayor.

Las enfermedades sexuales fueron muy corrientes en la época, como lo fue también la tuberculosis. Películas de Carol Reed

1935Sucedió en París (“It Happened in Paris”), codirección con Robert Wyler.
1935- Midshipman Easy.
1936- Laburnum Grove.
1937- Dime con quién andas (“Who's Your Lady Friend?”).
1937- Talk of the Devil.
1938- Penny Paradise.
1938- El Amor manda (“Bank Holiday”).
1939- Cuidado con lo que haces (“Climbing High”).
1939- The Stars Look Down.
1939- A Girl Must Live.
1940- Tren nocturno a Munic (“Night Train to Munich”).
1941- A Letter from Home.
1941- Kipps.
1941- Su nombre en los periódicos (“Girl in the News”).
1942- El vencedor de Napoleón (“The Young Mr. Pitt”).
1944- The Way Ahead.
1945- The True Glory.
1947- Larga es la noche (“Odd Man Out”).
1948- El ídolo caído (“The Fallen Idol”).
1949- El tercer hombre (“The third man”).
1951- Men of the Sea.
1952- Desterrado de las islas (“Outcast of the Islands”).
1953- Se interpone un hombre (“The Man Between”).
1955- El niño y el unicornio (“A Kid for Two Farthings”).
1956- Trapecio (“Trapeze”).
1958- La llave (“The Key”).
1959- Nuestro hombre en La Habana (“Our Man in Havana”).
1963- El precio de una muerte (“The running man”).
1965- El tormento y el éxtasis (“The Agony and the Ecstasy”).
1968- Oliver! (“Oliver!”).
1970- Flap.
1972- Follow Me.





Roman Polanski nació el18 de agosto de 1933, en París (en polaco: Roman Rajmund Polański) es un director de cine,  productor, guionista y actor polaco nacido en Francia .



Roman Polanski

Polanski estrenó (diciembre de 2005 en España) Oliver Twist (2005), una película con la que se identificaba.
 Premios y nominaciones

Año
Categoría
Película
Resultado
2002
Ganador
1980
Candidato
1974
Candidato
1968
Candidato

Año
Categoría
Película
Resultado
1980
Tess
Candidato
1974
Chinatown
Ganador
1968
Rosemary's Baby
Candidato

Año
Categoría
Película
Resultado
2002
El pianista
Ganador

Año
Categoría
Película
Resultado
2002
El pianista
Ganador
1976
Palma de Oro
Candidato



Como director
Rower (corto, 1955)
Usmiech zebiczny (corto, 1957)
Rozbijemy zabawe... (corto, 1957)
Morderstwo (corto, 1957)
Lámpara (corto, 1959)
Gdy spadają anioły (corto, 1959)
Ssaki (corto, 1963)
Les plus belles escroqueries du monde (1964, sólo un episodio)
Repulsión (1965)
Macbeth (1971)
¿Qué? (1973)
Chinatown (1974)
Le Locataire (1976)
Tess (1979)
Piratas (1986)
Frantic (1988)
Bitter Moon (1992)
El pianista (2001)
Oliver Twist (2005)


Referencias
1.     Oliver Twist, Or, The Parish Boy's Progress By Charles Dickens, Contributor Philip Horne Published by Penguin Classics, 2003 pg 486 ISBN 0-14-143974-2
2.     Ackroyd, Peter 'Dickens' London, Sinclair-Stevenson, (1990) pg 216 ISBN 1-85619-000-5
3.     'Bentley's Miscellany', 1837
4.     Oxford Reader's Companion to Dickens (Paul Schlicke, Editor). Oxford: Oxford University Press, 1999, p. 141.
5.     Ackroyd, PeterDickens. New York: HarperCollins, 1990, pp. 216-7
6.     Donovan, FrankThe Children of Charles Dickens. London: Leslie Frewin, 1968, pp. 61-62
7.     Dunn, Richard J.Oliver Twist: Whole Heart and Soul (Twayne's Masterwork Series No. 118). New York: Macmillan, p. 37.
Véase también